Gracias, Señor, por la aurora
Gracias, Señor, por la aurora,
gracias por el nuevo día,
gracias por la Eucaristía,
gracias por nuestra Señora.
Y gracias por cada hora
de nuestro andar peregrino.
Gracias por el don divino
de tu paz y de tu amor,
la alegría y el dolor
al compartir tu camino.